Perjuicios y karma
En el que volvemos a hablar de Ucrania, comparamos problemas reales con imaginarios y explicamos gráficamente la diferencia entre karma y suerte.
Ucrania es la gran historia de movilidad de estos días. Es indiscutible. “Huir de un país a la carrera”, decía Alsina. Y estoy orgulloso de todo el trabajo que está haciendo el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) estos días en muchos frentes. A través de Renfe y Adif, por ejemplo, ha organizado la logística para el traslado de refugiados ucranianos que se desplazan a través del modo ferroviario, en el marco del proceso global puesto en marcha por el Gobierno y de forma coordinada con el resto de ministerios involucrados.
Barcelona Sants se ha convertido en el hub principal de recepción de ucranianos, con más de 200 diarios y con destino final Chamartín, Atocha, Alicante y Valencia. Junto con Cruz Roja, se han organizado dispositivos de asistencia en diferentes puntos, centros de servicios y otros espacios en las estaciones ferroviarias de toda España donde llegan refugiados. Todos están siendo trasladados en trenes gratuitos, y se está ofreciendo avituallamiento. Se han facilitado ya más de 4.500 billetes, aunque probablemente estará más cerca de los 5.000 cuando leas estas líneas. También se ha montado un dispositivo en Irún para los refugiados que viajan vía Hendaya, también con la participación de Cruz Roja. Allí son trasladados hasta San Sebastián, Valladolid y Chamartín.
Estos días estamos leyendo las historias de mucha gente que ha ido a buscar refugiados. Es el caso de Chapu Apaloaza y sus compañeros, que llevaron cuatro furgonetas cargadas hasta arriba y se trajeron a varias familias. Es muy interesante la parte de la noticia en la que hablan de los campamentos de refugiados de Dorohus, “donde se ofrecen viajes (...) a destinos de manera aleatoria para comenzar una nueva vida”.
"Allí se van recitando destinos y plazas libres en coches, furgonetas o autobuses que salen para distintos países europeos y los refugiados van aceptando casi sin saber muy bien a dónde se dirigen", explican al periodista, Ignacio Murillo. Tengo amigos que han ido en misiones de ese tipo y que probablemente ahora estén en la carretera así que, desde aquí, mucha suerte a todos.
INFORMACIÓN DE SERVICIO: Ya está funcionando el teléfono (+34) 91 047 44 44, que da información 24 horas al día a las personas desplazadas de Ucrania. Además, en ese mismo número también se darán citas para los centros de recepción y se atenderá en ucraniano. Se extenderá la protección, permiso de trabajo y residencia en 24 horas a todos los que vivían en Ucrania, de cualquier nacionalidad, y a todos los ucranianos que vivían en España. Se ha habilitado además el mail apoyo.ucrania@inclusion.gob.es para quienes tengan información sobre transportes o envío de transportes para traer gente.
Hay noticias de movilidad relacionadas con el traslado de material militar. Sobre este tema, polémico para unos pocos, recomiendo la magnífica entrevista de Daniel Ramírez a Pablo Castellano, uno de los opositores más virulentos a la OTAN en 1986. No sólo ha cambiado su opinión sobre la organización, sino que considera que no dar armas a Ucrania “es dejar al gorila pegar a la ancianita”. No podría haberlo dicho mejor.
Entre tanto, tenemos a los dementes de siempre hablando de mierdas sobre “un programa militar biológico ucraniano dirigido por EEUU”. Obviamente, no voy a enlazar a esta gentuza, como no lo hago con nada antivacunas, terraplanista u homeopático. Los prorrusos son una fiebre, y la única cura es ponerles a todos un cencerro (nótese la ingeniosa referencia a SNL y procedan a disfrutar de uno de los mejores sketch en la historia del programa).
¿Pero sabéis quién sí ha contribuido a difundir la milonga antiucraniana? Sorprendentemente, la misma plataforma de camioneros que ha llamado para colapsar el país. Los mismos que llaman “nazi” a Zelenski (que es judío). Con esa entrevista os hacéis una idea del paisanaje. Eso sí, dentro de las opiniones que expresa su portavoz, protestan por algo que es real y un problema a resolver: el elevadísimo coste del combustible y de la energía.
Nunca he leído tantas cosas sobre el pool en mi vida. En este artículo de El Periódico de la Energía hablan de lo que quieren las eléctricas y a qué están dispuestas. Es muy explicativo y, a título personal, me hace tener bastante claro qué deberíamos hacer. Spoiler: no coincido con las eléctricas. Este hilo de Pedro Serrahima sobre el sistema marginalista es demoledor, pero tiendo a estar de acuerdo casi siempre con sus conclusiones. Dicho esto, no soy un experto y reconozco que es un tema extraordinariamente complejo. Espero que encontremos entre todos soluciones lo antes que podamos, porque la alternativa tiende al desastre.
El perjuicio de ir paseando al Bernabeu
Una de las situaciones más raras que he visto, como madrileño, es leer que a cierta gente en determinadas comunidades autónomas les parece mal últimamente que la cabecera de sus líneas vayan a estar en Chamartín Clara Campoamor. Respeto total, porque no me puedo poner en el lugar de todo el mundo, pero casi todos los madrileños con los que he hablado flipan un poco, la verdad. Parece que quieras mandarles a Móstoles (no es un insulto, yo soy de Móstoles). Pero lo cierto es que Madrid no tiene un centro, tiene dos. Y habrá mucha gente que prefiera el centro del norte.
Parando en Chamartín, el turista ocasional que quiera pasearse por Sol, la Plaza Mayor y el Prado apenas se come unos minutos de más y puede llegar cruzando un eje rapidísimo, con unas Cercanías engranadísimas y dos líneas de Metro muy nuevas. Y el usuario hardcore, el que viene a trabajar, sabe perfectamente que Chamartín no sólo está más pegado al centro del corazón económico de Madrid, al Bernabéu, las Cinco Torres o las dos principales agencias de noticias. Es que tiene mejor conexión con el aeropuerto y con todos los centros empresariales de la A6 y de la A1, incluyendo La Vela o el Distrito C. Asimismo, permite mejor las conexiones entre el norte y el este de España y ayudará a llevar a zonas muy turísticas a gente de zonas como Galicia y Asturias.
Madrid está concebido a largo plazo bajo el principio de “una estación, dos terminales”, y no creo que ninguna sea peor que otra. Corcho, es que a Chamartín voy andando desde casa. ¿Lo mejor? Cuando se termine la estación pasante de Atocha todos los trenes desde el este de España pararán en las dos. Todo esto lo cuenta bien Miguel Elizondo en El Español, y creo que va a ganar una apuesta. Le he robado la frase del subtítulo sobre el perjuicio porque es maravillosa. Roger Senserrich tampoco entiende que esto, que se sabía desde 2007 y era vox populi entre todo aquel con un mínimo conocimiento del sector porque es un cambio esencial para la liberalización ferroviaria, se haya convertido en una polémica. No sé qué solución se buscará pero, como ciudadano, ni siquiera creo que haya un problema.
Karma vs Suerte
El otro día me pasó algo extraordinario. Después de comentar en redes sociales que quería ver la actuación de Louis C.K. en Madrid, y que no tenía tickets, recibí el mensaje de un desconocido con su teléfono diciéndome que tenía dos entradas en primera fila que le habían regalado y que, como no podía ir porque tenía un viaje, me las daba a mí. Le llamé, por supuesto, y me ofrecí a pagárselas. Pero él se negó. Me dijo que a él le habían salido gratis, que me conocía desde hace años porque me ha seguido en Twitter todo este tiempo y que quería tener ese gesto. No recuerdo la conversación en detalle y me ruborizo un poco al recordarla pero, en resumen, me dejó claro que en ese tiempo le he sido útil. Que su vida ha sido algo mejor conmigo que sin mí.
Como me ofreció dos entradas, llamé a un buen amigo para ver si quería acompañarme. Por motivos de salud no puedo hacerlo, pero me dijo algo que se me quedó grabado. “Me estás diciendo que ha sido suerte. Pero si te hubieses encontrado las entradas por la calle habría sido suerte. Lo que ha sido de verdad ha sido karma”.
Unos días después, la cuenta de Twitter de la web de cine de terror Aullidos me notificó que había ganado dos entradas para ver Malnazidos en el típico concurso en el que participas por chicuela. Y sí, eso sí fue suerte. Ganazas de verla.
Me acordé mucho de la diferencia entre karma y suerte al recibir por LinkedIn, pocos días después, un mensaje de un suscriptor de este boletín, Óscar, que me escribía lo siguiente:
“Somos muchos los que te descubrimos por azares de la vida a través de esta red. Nos gustan tus publicaciones, compartiremos tu opinión más o menos, pero las leemos. Por favor, cuando tengas ganas, escribe otra publicación. Da igual hoy o dentro de un año, cuando llegue seguro que es el momento de leerla”.
Estas líneas se deben a gente como Óscar o como Víctor. Porque, como conviene recordar en tiempos extraños, nos rodea mucha gente extraordinaria. Conozco personas que están superando cualquier límite de resistencia y jugándose su salud para liderarnos y asegurarse de que llegamos a buen puerto. Tipos generosos con su tiempo y su esfuerzo capaces de ir a Ucrania a traer a víctimas de un conflicto que no hemos causado. Servidores públicos que se están dejando la vida por mejorar las de aquellos que les rodean. Familias que están arrastrando a sus hijos por toda Europa para que cuando les prometen que todo va a ir bien no sea una mentira ¿Conclusión? Como dice el Mandaloriano, éste es el camino. No voy a decir nada que no esté en el imperativo categórico kantiano o en las retransmisiones de Andrés Montes. Pero a pesar de todos los obstáculos, de toda la lucha y el sufrimiento, y de todas las cosas terribles que estamos viendo estos días, si tratas a los demás como te gustaría que te tratasen la vida puede ser maravillosa.
Más madera
Las obras para mejorar la movilidad suponen molestias para los ciudadanos, y si tenemos que hacer muchísimas obras en los próximos años en el marco del plan de recuperación, nos encontramos situaciones complejas. Como tenemos un plazo para hacer obras, no cabe duda de que donde más cosas vayamos a hacer, menos cómodos van a estar durante una larga temporada. El caso de Barcelona y las quejas de la RACC son un ejemplo.
Talgo no ha anunciado aún su salida de Rusia y los medios se han dado cuenta.
Keego Mobility ha presentado su bicicleta eléctrica especialmente diseñada para reparto KG4 en el Taipei Cycle Show. También incluye un programa de alquiler. Interesante pensar en el mercado del leasing a gran escala de bicis eléctricas.
Repsol y Nissan siguen inaugurando estaciones de carga rápida. Estoy seguro de que son mejores que el anuncio del Juke Kiiro inspirado en Batman. Sé un superhéroe, pero bien de gasolina… No lo veo muy en zeitgeist. Tampoco entiendo del todo que un coche que se llama, básicamente, “amarillo”, se alíe con una película que es casi totalmente roja y más oscura que el carajo.
Mundimoto ha levantado 20 millones y espera facturar cien. Me ha chocado ver en su web que no tienen nada eléctrico.